Cuando tenía que alumbrar a su hijo número 11, como en ocasiones anteriores, Carmen Gamarra Rosas (46) confió en su esposo para que éste atienda el parto. El agricultor extrajo al neonato ya muerto y ante las complicaciones, no supo qué hacer, la mujer murió con una hemorragia interna a causa de la retención de la placenta. Todo ocurrió en el domicilio de la pareja en el anexo de Turhuaracra, en el distrito de San Pedro de Cajas.
El director de la Red de Salud de Tarma, Fredy Amaro Poma, informó que la mujer no tuvo ningún control prenatal en su etapa de embarazo y que los partos de todos sus hijos siempre fueron atendidos por el esposo.
La víctima fue evacuada cadáver al centro de salud, que se construyó en la zona para que la gestante tenga un control prenatal a cargo del personal de salud, pero lamentablemente se resisten a concurrir.