EN ESTA FERIA DE CIENCIAS PARTICIPARAN DELEGACIONES DE TODA LA REGIÓN JUNIN Y COMENZARA EL DIA DE HOY 30 DE OCTUBRE 2013, TODOS ESTAMOS INVITADOS.
EN EL AÑO 2012 EL ESFAP SAN PEDRO DE CAJAS, OBTUVO EL PRIMER PUESTO CON EL PROYECTO: “INTERPRETACIÓN PICTÓRICA DE LOS SIGNOS Y EL ARTE DE LA HUASHACATA DE SAN PEDRO DE CAJAS”, POR EL ESTUDIANTE NIEL ESPINOZA PEÑA.
RESUMEN DEL PROYECTO
INTERPRETACION PICTORICA DE LOS SIGNOS DE LA HUASHACATA DE SAN PEDRO DE CAJAS por Neil Espinoza Peña (Egresado de la ESFAP “SPC”)
La presente investigación trata acerca de la explicación de los signos e iconos expresado en el tejido de la Huashacata en la Comunidad Campesina de San Pedro de Cajas, descifrada pictóricamente; utilizando la investigación etnográfica como su metodología y, qué visión del mundo ha surgido en atención a las obras artísticas. Por supuesto el proceso en sí para llevar a cabo la recolección de datos y la relación surgida con los informantes (los artistas y creadores artesanales), se desarrolló considerando la tradición oral.
Por otra parte resulta muy especial, dentro de la perspectiva que se indaga hacer una correlación, holísticamente entre lo que implica el abordaje etnográfico y su relación con la educación estética, a partir de las expresiones pictóricas, diseñados académicamente y con una población seleccionada de artesanos en la Comunidad Campesina de San Pedro de Cajas.
El tratamiento del tema implica la interpretación de los iconos y signos expresado en el tejido de la Huashacata a partir de la investigación artística y etnográfica.
Y que la presente investigación se desarrolla considerando la referencia histórica de la labor realizada por las mujeres andinas que utilizaron las pieles y la fibra de la vicuña, en sus manifestaciones artísticas en el lugar del abrigo rocoso de Telarmachay; esto se evidencia por el conjunto de herramientas como las raederas, los alisadores, los punzones y agujas de hueso, descubiertas en una sepultura del nivel VI, estaba en efecto asociado al esqueleto de una mujer; según las investigaciones ejecutadas por la arqueóloga francesa Daniele Lavallee.
Las obras artísticas tratan de la relación intrínseca de la mujer andina con su ecosistema, interpretado pictóricamente en la representación de la mujer como el centro de interés de la composición abierta, simétrica en la figura humana, y asimétrica en la configuración con lo que respecta a los otros elementos, técnicamente existe el predominio de colores cálidos, en armonía de los colores complementarios, resaltando el retrato con aplicación de veladuras; la mujer indígena, representa la trascendencia histórica de ser el protagonista de las expresiones artísticas dentro de la textilería en la interpretación de los signos e iconos del ecosistema del hombre del ande; y que actualmente se efectúa la producción textil de la Huashacata en los talleres familiares, utilizando diversas materias primas como la lana de la llama, la oveja y la fibra de vicuña; donde se plasma los decorativos signos e iconos abstraídos de los elementos naturales de la flora y fauna del medio ambiente.
En la historia del Tahuantinsuyo, los incas incrementaron la producción textil desarrollando e imponiendo una mita textil, la cual los obligaba a tejer para el Estado. Así el tejido paso a adquirir un valor ponderado que revela relaciones políticas y socio económico del Estado, pero a la vez también contribuyo que en todos los pueblos existiera una homogeneidad de diseños.
En la actualidad se observa el resultado de años de tradición transmitida de generación a generación, ya que los diseños plasmados es todas sus obras artísticas son de una exquisita belleza estética y cromática.
En la sociedad contemporánea se mantienen los mismos cánones de perfección y desarrollo de tejidos como hace miles de años. En la Comunidad Campesina de San Pedro de Cajas, la cual es la cuna de la artesanía peruana, es donde se concentra parte del arte peruano actual, ya que aquí se pueden observar la conjunción del arte incaico, debido a la importancia que se ha dado al arte en sí, y al deseo de conservar sus raíces indígenas.
Los aspectos de la vida cotidiana y expresiones del lugar, así como, naturaleza, religión, costumbres, sociedad, se ven representados en cada uno de las expresiones artísticas, los cuales han variado a través del tiempo, en algunos casos adaptándose a las nuevas realidades contemporáneas, haciéndolas diferentes unas de otras.
Al adquirir la información de primera mano sobre los detalles de cada uno de los signos iconográficos a analizarse, pero de una manera homogénea; se optó por acudir a los talleres artesanales donde se producen y plasman los símbolos andinos, para así obtener información de la iconografía de las personas que los realizaban, no obstante esta muestra solamente reflejaría los iconos actuales, por esa razón, también se tomó como punto de investigación al museo “Yuri” y trabajos de investigación de D. Lavallee.
Gracias a este método la investigación de campo se facilitó, ya que en los talleres artesanales se pudo observar como las mujeres tejen los textiles, y en el museo se observó textiles precolombinos, dando una idea muy clara de las influencias precolombinas en la actualidad.
La gran variedad de iconos andinos, constituyen el espejo en donde se evidencia el desarrollo político, económico, social y religioso de esta cultura, así como delinean de gran manera el contenido simbólico y utilitario de sus elementos iconográficos.
Las manifestaciones iconográficas andinas, elementos estéticos de la simbiosis entre la flora que alberga a un pueblo y la fauna que también provee de abrigo – alimento, expresado en la representación de los iconos y signos en el tejido de la lliclla sampedrana; interpretación que destaca la abstracción de la flora (“flor del inca”) y fauna (gaviotas, patos silvestres).
Se resalta entre los signos de la Huashacata la figura del “el rombo dividido o Coco partido” que expresa la dualidad del Imperio, “pato y paloma” icono zoomorfo que representa a una ave, esto se enriqueció con la policromía de colores cálidos y fríos, de estructuras en trazo armónico binario y terciario, en yuxtaposición, geometría figurativa, simétricos, en equilibrio, variedad, ritmo y movimiento que enfatiza el mensaje de la “pasión” femenina; el mensaje iconográfico es ecológico con respecto a las vivencias y la forma de vida de la mujer andina; “la flor del inca” que representa la belleza de la flora y analógicamente de la mujer, del periodo precolombino que tiene la estructura de ordenamiento de un trazado armónico binario y de tripartición, la distribución de formación es diagonal, el modulo es la unidad sin patrón de repetición, categorías-leyes compositivas con proporción andina, equilibrio simétrico y simetría en el eje horizontal y longitudinal, con una Cromática de monocromía, de principio de dualidad y complementariedad, Geometría Figurativa que expresa la estructura cruz que se compone simétricamente bajo la organización de las diagonales, el elemento hexágono regular es el centro y base de la tripartición.
En consecuencia la figura y el fondo se integran por el material de las superficies del lienzo utilizado como son las mantas, la loneta y la tela cañamazo, obteniendo como resultado una expresión artística única por su temática andina.
Las estructuras de síntesis se constituyen por aquellos signos que conjuncionan orgánicamente varias estructuras de formación simples, para formar estructuras complejas que, por definición, sintetizan en un signo final, el cual encierra una gama de principios estructurales básicos, además de un gran carácter estilístico, esquemas que establecen su carácter iconológico.
Los iconos y signos geométricos tienen diversos planos de aplicación en el diseño, se presentan en toda su composición simbológica, armónica y modular.
En la iconografía andina precolombino se observa una manifestación visual de distintas formas, símbolos geométricos, figuras zoomorfas, deidades, representaciones de la naturaleza y sus vivencias y forma de vida. Se observa animales comunes como los camélidos sudamericanos que les brindaban comida, protección y materia prima, las aves que eran respetadas como seres preciados de la naturaleza, así mismo la flora; iconos que permanecen y se siguen plasmando en la actividad artística.
La representación de los camélidos sudamericanos silvestres embellecida de su fibra como recurso natural para el tejido textil, símbolo y patrimonio nacional que identifica a los herederos del Tahuantinsuyo; es parte de la composición pictórica por ser el elemento del génesis de la expresión artística allí en el abrigo rocoso de Telarmachay.
La alpaca, la llama y la vicuña eran las proveedoras de la materia prima y su uso lo especificaba el rango social. Esto sucedía históricamente en el imperio incaico, por lo que en el uso de los iconos era lo mismo. Existían iconografías reservadas únicamente para ceremonias y los otros los cuales se podían utilizar según el criterio de la persona y la comunidad.
La interpretación artística explica de cómo se expresa la forma, el color y la relevancia del contenido del mensaje andino, su trascendencia sobre las relaciones sociales, determinando su relación costumbrista en la sociedad sampedrana, y contribuir a rescatar parte de la identidad andina, para así fomentar un renacer de esta cultura olvidada.
Si la cosmología “expresa los conceptos de orden, número y ritmo, cohesionando lógica y orgánicamente a las concepciones del espacio en una visión integral del todo y sus partes reflejado en la unidad de la multip
licidad de la composición, se manifiesta en la iconología geométrica y en la composición simbólica del diseño, como una forma de abstracción de las leyes de ordenamiento universal” (Milla. 2004, 8).